La irrupción social de internet ha facilitado que el consumidor pase de ser un agente pasivo a uno activo. Este papel se desempeña en todos los ámbitos, pero en el caso del marketing ha permitido dar luz verde a la creación de nuevos socios de marca a través de la co-creación: fruto de las interacciones entre la marca y el público; pero también con la credencialitzación, es decir cuando el comportamiento de la marca inspira la creación de un distintivo comunitario de la marca.
Es por ello que con el marketing on line debemos hacer hincapié para:
• Fomentar la participación comunitaria
• Proporcionar oportunidades que permitan al cliente demostrar sus competencias.
• Impulsar prácticas que ofrezcan a los miembros de la comunidad acumular capital cultural a través del ejercicio de la creación de valor para el consumidor.
• Enfatizar con el valor creciente proporcionando recursos afectivos a través de una red social simpática.
• Personalizar la marca con el objetivo de crear valor y soluciones únicas pero reproducibles.
• Hacer que la marca sea reproducible y repetible con la voluntad de obtener un valor.
Ahora bien, si tenemos presente como hemos de activar o fomentar que el consumidor se sienta parte de la marca y se añada en el proceso de creación de valor, para alcanzar el éxito participativo debemos trabajar para que haciendo hincapié en la evolución continua, animando al consumidor a participar en la construcción de marca. La clave es pues la co-creación, haciéndolo con una amplia gama de productos donde las redes sociales son una excelente herramienta.